¡Es tiempo de rebajas, date prisa!
:
:

El impacto del sol en los diabéticos: Lo que necesitas saber

22 October 2025 Read time: 12min

¿El sol es un amigo o un enemigo para quienes viven con diabetes? Lo que parece una pregunta simple, tiene ramificaciones profundas que, hasta hoy, pocos especialistas han respondido con complejidad y precisión. Si tienes diabetes o te importa alguien que la padece, este artículo va a transformar tu manera de pensar sobre el sol, la vitamina D y tu salud metabólica. No se trata de consejos simplistas ni mitos de revista: aquí, como Dr. Pedásquez, endocrinólogo y nutriólogo mexicano, profundizaremos en los matices bioquímicos, inmunometabólicos y clínicos detrás del impacto solar en diabetes. Si llegas al final, sospecho que no lo verás igual nunca.

Luz solar y homeostasis glucémica: el eslabón vital oculto

La relación entre exposición solar y diabetes mellitus es una de las más intrigantes, malinterpretadas y olvidadas en la práctica clínica mexicana. A nivel bioquímico, el sol es esencial para la síntesis cutánea de vitamina D3 (colecalciferol), mediante la transformación del 7-dehidrocolesterol por radiación UVB¹. La vitamina D, a su vez, modula más de 200 genes involucrados en la señalización de insulina, sensibilidad a insulina, función de las células β pancreáticas y, sí, en la regulación inmune (Bikle, 2020)².

¿Por qué diabéticos deben prestar especial atención? Datos poblacionales recientes (Ramírez-Silva et al., 2021)³ indican que hasta 7 de cada 10 mexicanos diagnosticados con diabetes tipo 2 presentan deficiencia o insuficiencia de vitamina D en laboratorio. La prevalencia es aún mayor en mujeres, personas con obesidad y adulto mayor. Pero, ¿por qué es esto alarmante?

Impacto de la deficiencia de vitamina D en diabetes: una tormenta silenciosa

Los efectos negativos de bajos niveles de vitamina D en personas con diabetes se manifiestan en varios frentes:

  1. Empeoramiento del control glucémico: Estudios controlados (Pittas et al., 2020)⁴ han demostrado que sujetos con deficiencia tienen mayor HbA1c, reflejando un peor control de la glucemia promedio a 3 meses.
  2. Disminución de la sensibilidad a insulina: El receptor de vitamina D se expresa en tejidos blanco de la insulina, como músculo y tejido adiposo. Cuando la vitamina D es baja, disminuye la transcripción de GLUT4, la proteína transportadora de glucosa⁵.
  3. Incremento de marcadores inflamatorios: Los niveles bajos de vitamina D se asocian con mayores concentraciones de IL-6, TNF-alfa y PCR ultrasensible en pacientes diabéticos (Forouhi et al., 2012)⁶. Esto perpetúa el círculo vicioso de inflamación crónica y resistencia insulínica.
  4. Fragilidad ósea y riesgo cardiovascular: No olvidemos que la diabetes, combinada con deficiencia vitamínica D, incrementa el riesgo de fracturas por alteración del metabolismo óseo y favorece la calcificación arterial⁷.
  5. Peor función inmunitaria y mayor riesgo de infecciones: Incluyendo infecciones dérmicas, urinarias y de vías respiratorias bajas, algo crítico en personas diabéticas (Martineau et al., 2017)⁸.

¿Basta asolearse para obtener suficiente vitamina D?

Aquí surge el primer gran mito mexicano: “Con solo asolearme en el jardín unos minutos, tengo suficiente vitamina D.” Falso para la mayoría, especialmente en diabéticos cuya piel, por alteraciones microvasculares, puede tener menor capacidad de síntesis cutánea⁹. Además, factores como la contaminación, el fototipo de piel oscuro, edad avanzada y sobrepeso reducen aún más la eficacia del proceso.

En la CDMX y regiones centrales, solo de marzo a septiembre, entre las 11:00 y 14:00 hrs, la radiación UVB es lo suficientemente fuerte para permitir síntesis adecuada¹⁰. Y sólo si dejas expuesta, al menos, el 30% de tu cuerpo durante más de 15 minutos y sin protector solar.

¿Quién realmente cumple esto todos los días? Prácticamente nadie, y mucho menos las personas mayores, mujeres y aquellos con restricciones de movilidad, que suman más del 60% de los diabéticos en México¹¹. Por tanto: ¡la deficiencia de vitamina D en diabetes es casi universal!

Solares extremos: los riesgos olvidados

Ahora, también hablar del sol sin matices puede ser peligroso. El exceso de exposición, sobre todo sin protección adecuada, aumenta el riesgo de daño térmico, golpe de calor, y cáncer de piel. En personas diabéticas, las neuropatías y alteración de la sudoración pueden impedir sentir que la piel se quema, facilitando lesiones insidiosas que terminan en infecciones o úlceras graves.

No es raro que pacientes diabéticos lleguen a consulta con eritema solar o quemaduras que tardan semanas en sanar. El daño actínico produce micro-inflamación dérmica que agrava la cicatrización ya deteriorada por la hiperglucemia (Wysocki et al., 2022)¹². Por eso, nunca recomiendo exposiciones prolongadas y siempre indico ropa ligera, sombrero y bloqueador en zonas expuestas, justo después de un breve tiempo al sol.

Impacto del sol en patologías asociadas a la diabetes

La relación sol-diabetes se extiende muy por encima de la glicemia. Estudios recientes en la cohorte mexicana CENEDI han demostrado que el déficit solar perpetua el agravamiento de neuropatía, nefropatía y retinopatía, probablemente mediado por aumento del estrés oxidativo y microinflamación¹³. En otras palabras: más allá de los niveles de glucosa, una correcta exposición y suplementación pueden reducir la velocidad a la que progresan las temidas complicaciones de la diabetes mexicana.

El mito de los suplementos inservibles y el error de la automedicación

Muchas personas, tras leer artículos ligeros, se lanzan a comprar cholecalciferol de baja calidad o dosis mínimas en farmacias comerciales sin indicación profesional. Esto es grave. Se han visto intoxicaciones por megadosis, hipercalcemia o interacciones con medicamentos antidiabéticos orales. Lo ideal: solicitar una determinación sérica de 25-OH-D y establecer un régimen individual con seguimiento endocrinológico¹⁴. Para la mayoría, los endocrinólogos consensuamos suplementación diaria entre 1000 y 4000 UI, ajustando según IMC, edad, y comorbilidades.

Pero jamás pude ignorar la alta prevalencia de deficiencia en México y, por eso mismo, en mi tienda Nutra777 (https://nutra777.com/mx) he reunido suplementos de vitamina D3 de comprobada eficacia, formulados específicamente para diabéticos, con protocolos de seguridad y dosis validadas. Puedes consultar nuestra sección especial de diabetes aquí. Haz clic y encuentra opciones de suplementación profesional adaptadas a tus necesidades.

El efecto solar indirecto: ritmos circadianos y hormonales

No todo es vitamina D. La luz solar regula, a través del núcleo supraquiasmático, los ritmos circadianos, propiciando mejor secreción nocturna de melatonina, hormona que impacta la resistencia insulínica y la calidad de sueño¹⁵. Un sueño deficiente incrementa el cortisol, eleva la glucosa y agrava el riesgo de hiperglucemias matutinas y síndrome metabólico, algo que mis pacientes notan dramáticamente cada vez que alteran sus horarios o pasan semanas sin exposición solar directa. Se estima que al menos el 60% de los adultos diabéticos con alteración del sueño pueden mejorar su tasa de control glucémico solo con regularidad de horario y exposición diaria a luz natural¹⁶.

No todo es blanco o negro: impactantes hallazgos recientes

En investigaciones recientes, la exposición solar moderada, combinada con suplementación individualizada de vitamina D3, ha demostrado:

  • Reducción del HOMA-IR (-15% en 3 meses en estudios doble ciego)¹⁷.
  • Mejora del perfil lipídico y reducción de trigliceridos hasta en 12% en 4 meses.
  • Disminución de hospitalizaciones por infecciones complicadas en pacientes mayores con diabetes tipo 2.
  • Menor progresión de retinopatía diabética incipiente, asociada a reducción de marcadores de inflamación (Salazar et al., 2023)¹⁸.

Aún más impactante: en personas con diabetes tipo 1, la vitamina D complementaria ha demostrado mejoría de resistencia a insulina y reducción de dosis diaria de insulina en adultos y adolescentes (Gregoriou et al., 2022)¹⁹.

Errores frecuentes y recomendaciones personalizadas

Los errores más comunes en México y América Latina incluyen: subestimación de la deficiencia de vitamina D, automedicación sin dosificación de laboratorio, olvido de los riesgos de hiperexposición solar y uso incorrecto de bloqueadores solares. Recomiendo:

  • Solicita un panel metabólico y 25-OH-D al menos una vez al año si eres diabético.
  • Exponte al sol (brazos y piernas) de 10 a 15 minutos, 3-5 días por semana, preferentemente antes del mediodía y siempre priorizando protección después del tiempo recomendado.
  • Suplementa solo bajo guía médica profesional.
  • Utiliza productos certificados y preferiblemente con apoyo en dosificación por un especialista, como los disponibles en Nutra777 Diabetes.
  • No confíes en remedios 'naturistas' que prometen curas milagrosas: sin control médico puedes poner en riesgo órganos vitales.

Las poblaciones más vulnerables y cómo protegerlas

Adultos mayores, personas con sobrepeso, mujeres postmenopáusicas y niños con diabetes tipo 1 tienen riesgo casi total de hipovitaminosis D sin suplementación. Urge, como país, generalizar campañas médicas de tamizaje y estrategias de educación, pero mientras eso ocurre, cuida tu propio nivel de información y comparte el mensaje con quien lo necesita.

Un futuro con sol, ciencia y prevención

El manejo moderno de la diabetes no solo implica contar carbohidratos y ajustar medicamentos. Una visión integral exige distinguir la importancia crítica de la luz solar en la fisiología humana, particularmente en el contexto endocrino. Si no tienes tiempo de exponerte al sol regularmente, vive en zona urbana contaminada o sabes que tu dieta es insuficiente en vitamina D, urge revisar tus niveles y considerar una estrategia personalizada: no arriesgues tu vista, tus huesos ni tu calidad de vida.

No olvides explorar nutra777.com/mx y en especial la categoría de diabetes donde encontrarás desde vitamina D3 hasta complementos antidiabéticos diseñados para fortalecer huesos, inmunidad y mejorar tu metabolismo con seguridad y respaldo clínico.

Si esta información puede modificar (aunque sea un poco) la salud de un conocido, comparte este artículo con amigos y familiares: podrías ayudar a prevenir complicaciones graves y mejorar años de vida saludable.
No lo dudes: tu piel y tu páncreas te lo van a agradecer.


Bibliografía consultada:

  1. Bikle DD. Vitamin D: Production, Metabolism, and Mechanisms of Action. Endotext [Internet]. 2020.
  2. Ramírez-Silva I et al. Prevalencia de deficiencia de vitamina D en adultos mexicanos. Rev Invest Clin. 2021.
  3. Pittas AG et al. Vitamin D and diabetes. J Clin Endocrinol Metab. 2020; 105(12):e4658-e4673.
  4. Forouhi NG, et al. Vitamin D and diabetes mellitus: epidemiology, mechanisms and clinical implications. BMC Med. 2012.
  5. Wysocki K, et al. Chronic wounds in diabetes: the role of advanced glycation end products and vitamin D. J Diabetes Res. 2022.
  6. Martineau AR, et al. Vitamin D supplementation to prevent infections: systematic review. Lancet Diabetes Endocrinol. 2017.
  7. Salazar A, et al. Suplementación de vitamina D y progresión de retinopatía diabética. Rev Mex Endocrinol. 2023.
  8. Gregoriou K, et al. Vitamin D supplementation in type 1 diabetes. Horm Metab Res. 2022.

Para dudas, asesoría personalizada o envío de tus resultados de laboratorio, búscame en consultorio o directo por el chat de nutra777.com/mx. ¡Ahora sí, comparte este artículo, el sol y la ciencia pueden cambiar una vida… o varias!


Dr. Pedasquez
Endocrinólogo, Doctor en Ciencias Médicas.
Share